Hermoso primer amor

Noviembre 2006

Déjame llorar en silencio

Me he quedado con los brazos abiertos,

esperando un abrazo que no llegará.

Me he quedado con tus besos a medias,

esperando recibir una muestra de amor.

Te has marchado con todos los recuerdos,

y ya no me queda más por vivir.

Dejame llorar en silencio,

esta soledad que me acaba,

estos pasos llenos de nada,

de aquél primer beso de ayer.

Dejame llorar en silencio,

esta incertidumbre del alma,

esta vida que está vacía,

sin tu amor y tu alegría.

Zoar De León

__________________________________________________________

Más que un sueño

 

Iba por el camino

andando sin un destino,

sólo consumida

por mis pensamientos,

totalmente destruída

con tantos desalientos.

Antes de conocerte,

no conocía mi sonrisa;

antes de poder verte,

estaba forzada m risa.

Ahora me levanto

y no me cuesta pensar,

en lo que me vas a dar.

Ayer fue un beso en los labios,

antier un viaje al espacio,

y hoy no me puedo imaginar,

lo que me vas a entregar.

Me agarras por sorpresa,

sin prisa y sin torpeza,

te siento en mi piel,

me sabes a miel.

Te miro a los ojos

y tú de reojo,

pues sabes que eres todo para mí,

y sin tí perdida me sentí.

Ahora vivir tiene un propósito,

respirar ya no es monótono.

Mis días se llenan de calor,

con las acuarelas de tu sabor.

Es el mismo cielo y el mismo suelo,

pero contigo es más que un sueño...

Zoar De León

__________________________________________________________

¿Quién no daría lo que fuera porque aquél primer amor se hubiese convertido en uno sólo con uno mismo?

Es que antes del primer amor, uno tiene tanto amor apretujado dentro que al primer (perdón por la palabra) pendejoo que se le atraviesa en el camino le suele regalar, sólo por despresurizarse, sólo por casualidad, un poquito de sí. A veces se termina regalando todo porque somos inconcientes de la pesada carga que puede llegar a ser poner el amor en una sola persona. Lo bueno es que por más que se regala, jamás se queda uno sin amor para dar.

Ay pero si a alguien culpo es al tiempo, por enredarme tan seguido en sueños sin paradero seguro.

Y al tiempo también culpo de haberme traído mis mayores dichas, como mis mayores desgracias.

Suerte que hoy esa dicha me ha tocado vivirla, pero nuevamente recae en el tiempo cuanto me ha de prestar para el regocijo.

Mientras tanto no me quejo, tiempo, aquí se está bien, con mil fallas, con mil desgracias, con mil amores fallidos, pero uno triunfante que vale por mucho más.

TQJNT