miércoles, 24 de marzo de 2010

¡Este mundo es mío!

sweet kiss

Hay cosas en la vida que no se dicen, simplemente se saben.

Cosas tan simples como un gracias, te quiero, te admiro, por favor, te amo…

Cuando se saben es cuando se deja de luchar a palabrería para abrirle paso al silencio de las acciones. Porque a fin de cuenta las palabras no existen, sólo existen las personas y sus acciones.

Decir no siempre es lo mismo que hacer, hacer no siempre es lo mismo que saber y saber no siempre es lo mismo que decir. Hay personas que no hacen lo que dicen, que no saben lo que hacen y que dicen pero no saben ni qué dicen.

Y hay otras personas, que son aún peores que las últimas tres, y éstas son las que saben y no dicen ni hacen. Y es que el saber es un poder tan grande, eliminando la ignorancia es lo que guía al ser humano a ser lo que es. El saber, el conocer, el hambre de plantearnos incógnitas y seguirlas hasta resolverlas o jamás verlas resueltas. No es sólo razón, sino que es el uso apropiado de la razón.

Y qué son los sentimientos más que instintos combinados con una dosis de razón. La razón nos guía y la creatividad nos encamina.

El saber intrínseco es lo que nos hace personas. Conocer tus límites, conocer tu persona, conocer a los demás, saber que tienes un alma y una conciencia, una capacidad creativa y una libertad de elección.

Porque al final del día nosotros mismos es lo que tenemos dentro de este mundo tan vacío, nuestro día día, nuestro esfuerzo, nuestras acciones, nuestras palabras no vanas, nuestra aportación al mundo, nuestra visión, nuestros logros, nuestros fracasos, nuestras tristezas y lamentos, nuestros enojos, nuestras relaciones…

Este mundo es mío, yo así lo creé. Yo así lo escogí. Yo así lo imaginé. Yo así lo manipulé. Yo así lo moldeé.

Este mundo es mi trabajo, es mi sangre, es mi sudor, es mi cuerpo, mi alma y mi vida.

Este mundo, por nada en el universo lo cambiaba, por nada en el universo lo desacreditaba, por nada en el universo lo dejaba.

 

“Si esta vida es un sueño,

que mi dormitar sea eterno…”